El mes de octubre estuvo marcado por la incertidumbre política en Estados Unidos y en Europa -con el cierre parcial del gobierno estadounidense y la crisis presupuestaria en Francia en el foco-, la escalada inicial y la posterior rebaja de tensiones comerciales entre EE. UU. y China, y el ajuste de las expectativas de política monetaria. En este contexto, la Reserva Federal rebajó el tipo oficial en 25 puntos básicos, situándolo en el rango del 3,75%-4,00%, aunque el presidente Powell enfrió la posibilidad de un nuevo recorte en diciembre. Sin embargo, el mercado laboral estadounidense sigue mostrando señales de moderación y la inflación se mantiene en niveles elevados. En Europa, el BCE mantuvo los tipos de interés inalterados, mientras que los indicadores de actividad mostraron fortaleza con una lectura del PIB por encima de lo esperado y un IPC contenido cercano al 2%. En Asia, el Banco de Japón mantuvo el precio del dinero sin cambios, mientras que el relevo político situó a Sanae Takaichi como nueva primera ministra, con una agenda centrada en la política fiscal proactiva y la inversión en tecnología y defensa.