El mes de septiembre estuvo condicionado por los movimientos de la Reserva Federal y unos datos macroeconómicos mixtos en Estados Unidos, especialmente por el debilitamiento del mercado laboral. En ese contexto, la Fed aplicó una rebaja de 25 puntos básicos en el tipo oficial, hasta el rango del 4,00%-4,25%. Powell se mostró dispuesto a seguir relajando la política monetaria si el mercado laboral sigue mostrando señales de deterioro. Los futuros de los Fed Funds descuentan ahora 44 puntos básicos adicionales de recortes antes de fin de año, aunque la inflación se mantiene en niveles elevados. En contraste, el Banco Central Europeo mantuvo los tipos inalterados y adopta una postura prudente ante una inflación general contenida en el 2,0%, en línea con el objetivo. Sin embargo, los riesgos de un repunte inflacionario provocado por los aranceles y el crecimiento moderado de la economía de la eurozona son factores que Lagarde sigue de cerca.
Las expectativas de mayores recortes en EE. UU. impulsaron las bolsas globales a máximos históricos, pese a ser septiembre un mes típicamente bajista en bolsa. En Wall Street, el índice tecnológico Nasdaq 100 destacó con un repunte del 5,40% mensual. También registraron avances el S&P 500 (+3,53%) y, de forma más contenida, el Dow Jones (+1,87%). En Europa, se observó un movimiento de contagio: el Eurostoxx 50 ganó un 3,33%, mientras que el IBEX 35 se mantuvo como el mejor índice del continente, con una subida del 3,61% al mes (y del 33,46% en lo que va de año). En el ámbito comercial, la Casa Blanca aprobó una nueva ronda de aranceles sobre varios productos, entre ellos uno del 100% sobre los farmacéuticos con patente. En la esfera política, en Francia, Macron nombró a Lecornu como nuevo primer ministro tras la caída del Gobierno liderado por Bayrou.